viernes, 21 de diciembre de 2018

DESMONTANDO EL COLÁGENO COMO SUPLEMENTO ALIMENTICIO


Según la RAE un suplemento es aquella cosa o accidente que se añade a otra cosa para hacerla íntegra o perfecta. Estamos en la era de los suplementos alimenticios y no es nada extraño ver en televisión o prensa escrita una cantidad considerable de anuncios en los que se nos anima a consumir determinados productos, para mantenernos jóvenes, fuertes y sanos.
            Es verdad que en determinados momentos y situaciones de la vida, puede ser fundamental suplementar la alimentación con productos que nos aporten lo que nos hace falta pero no somos nosotros los que tenemos que decidir cuándo y qué necesitamos,  para eso tendremos que consultar a un médico o, en determinados casos, a un nutricionista.
            Aunque existen multitud de productos y dentro de ellos combinaciones de varios, en esta entrada nos centraremos en uno en concreto: el colágeno.
¿Qué es el colágeno?
Un poco de bioquímica para empezar...
            ESTRUCTURA:
            El colágeno es la proteína (bueno, realmente no es una única proteína porque existen más de 20 tipos de colágeno descritos) más abundante en los vertebrados y representa aproximadamente el  30% de la masa de proteínas del cuerpo.  Se encuentra formando parte de la matriz extracelular del tejido conectivo y dentro de éste sobretodo en el tejido conjuntivo y en el tejido cartilaginoso. Puede ser sintetizado por las células especializadas  de estos dos tejidos llamadas  fibroblastos y condrocitos respectivamente.  Se encuentra principañmente en la piel, los tendones y ligamentos, pero también en la córnea, el cartílago, vasos sanguíneos , el pulmón y el hígado.
            FUNCIÓN:
            Sus principales funciones son: proporcionar soporte, resistencia y flexibilidad  a los tejidos También están relacionados con otros procesos: transmisión de fuerzas (tendones), lubricación (cartílago), transmisión de luz (cristalino), generación de barreras (filtración o separación de tipos celulares) o darle suavidad y firmeza a la piel.


La digestión de las proteínas 
Y ahora un poco de fisiología básica...
Todas las proteínas aportadas por la dieta no pueden ser absorbidas directamente en el proceso de la digestión debido a su gran tamaño. Por este motivo  son digeridas hasta obtener sus componentes unitarios: los aminoácidos,   gracias a la actividad de las enzimas producidas en el estómago, el páncreas y  el intestino delgado.
 La digestión de las  proteínas se inicia en el estómago por acción del jugo gástrico, que rompe las proteínas en fragmentos más pequeños que denominamos péptidos. Estos  pasan al intestino delgado donde son fragmentados hasta obtener los  aminoácidos. Una vez obtenidos, se absorben en el intestino  pasando a la circulación sanguínea y de allí a las células que los  necesitan dónde serán captados para fabricar, con esas piezas, las proteínas que se necesiten en ese momento.
Colágeno, nutrición y alimentación
Los alimentos con colágeno son de origen animal y destacan la carne y el pescado,  siendo abundante en zonas que se consideran muchas veces desechos como la piel ,  huesos y tendones. Es a partir de estos desechos de ganado vacuno, porcino, equino y avícola de donde se obtiene un derivado del colágeno: la gelatina.
En el cocinado de alimentos ricos en colágeno una parte de este se solubiliza lo que le da a ese guiso el aspecto gelatinoso.
Desde el punto de vista nutricional, el colágeno y aún más la gelatina, tampoco aportan demasiado, pues son proteínas de bajo valor biológico por ser deficientes en aminoácidos esenciales, además cuanto más colágeno tiene la carne más fibrosa es y eso indica pero calidad.

 El origen de todo…
La imagen lleva como título Collagen unravelling, una escultura de Julian Voss-Andreae de 3.40 metros basada en la estructura del colágeno que representa, según su autor, el envejecimiento, una época de la vida en la cual la estructura del colágeno humano se degrada.
Esta degradación progresiva del colágeno y otros componentes que empieza aproximadamente sobre los 30 años acaban ocasionando enfermedades como la artrosis o la formación de arrugas en la piel y es en este punto donde entran en escena los famosos suplementos de colágeno.
Seis motivos para desmontar al colágeno como suplemento basados en la CIENCIA
Vayamos por orden y de forma ordenada:
1.    El colágeno es una proteína, por lo tanto si tomamos colágeno este se va a digerir igual que el resto de las proteínas que ingerimos, de manera que una vez terminado el proceso digestivo no tendremos la molécula original; tendremos sus aminoácidos  constituyentes.
2.    Las células fabrican el colágeno y siguiendo las instrucciones de su ADN a partir de los aminoácidos necesarios y que tiene disponibles después de la digestión de cualquier proteína.
3.    Existen inmensas barbaridades en la red sobre el tema. Por increíble que parezca  nos llegan a recomendar un “colágeno vegetal” y tienen las narices  de terminan con la siguiente frase… ¿Te animas a probar colágeno vegetal puro y empezar a sentir los beneficios de esta maravillosa proteína?...





4.     Informes de la EFSA: Los suplementos de colágeno publicitados, según un informe oficial de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria, EFSA, no sirven para el mantenimiento de las articulaciones ya que este colágeno no se absorbe.
5.    Más EFSA: La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria no ha dado luz verde a ninguna solicitud que permita hacer alegación de salud en los suplementos que incorporen colágeno.
6.    Se requiere una investigación más profunda e independiente para afirmar si se produce o no un efecto beneficioso con el consumo de  colágeno porque no hay pruebas evidentes que lo relacionen, de momento. Buscando evidencias científicas, es decir estudios sobre la posible utilidad o no de estos productos he encontrado un estudio publicado que nos informa sobre los beneficios de tomar colágeno… la sorpresa fue comprobar que los responsables del estudio pertenecen a una empresa que elabora y comercializa colágeno como suplemento… sospechoso, ¿No?
NUTRIENTES y  producción de colágeno
Por supuesto que existen sustancias que estimulan la producción del colágeno (pero que tomamos con la dieta) y es aquí donde las empresas que fabrican estos suplementos se apoyan para publicitar sus productos y esquivar la normativa. No es casualidad que muchos de estos productos incluyan por ejemplo magnesio y/o vitamina C en su composición porque estas dos sustancias en concreto tiene estudios que ha avalado la EFSA que les atribuye la propiedad de favorecer  la síntesis de colágeno. Analicemos el siguiente anuncio y saquemos nuestras conclusiones, son 21segundos en los que se dice una verdad: …“Gracias al magnesio la proteína colágeno te ayuda a conservar tus músculos huesos y  articulaciones en condiciones normales…”
Anuncio TV Colágeno con magensio (Ana María Lajusticia)
Volviendo al principio, si creemos que necesitamos suplementar nuestra dieta es porque algo no estamos haciendo bien…entonces, ¿Por qué no modificamos la dieta y conseguimos que sea saludable y equilibrada para no necesitar ningún aporte extra de nutrientes? Y si tanto nos gusta el colágeno pues nos hacemos unas manitas de cerdo, un buen caldo con hueso o incluso nos comemos unas gominolas o gelatina y listos. Nos hará el mismo efecto que el suplemento y además de salirnos más barato será más apetitoso, disfrutaremos más y nos aportará otros nutrientes además de proteína.